Einstein dejo claro que Dios no juega a los dados.

El universo en el fondo y unos dados indicando que Dios no juega a los dados.

Einstein repitió la frase de “Dios no juega a los dados” tantas veces en una conferencia de 1927 realizada en Bruselas que los demás físicos se cansaron de ella, como recordaría más tarde el físico teórico alemán Werner Heisenberg.