Cuando nos sentimos tristes, angustiados, enojados tendemos a perder nuestro sentido del humor. Pero se sabe que reír es bueno para nuestra salud mental. Reduce nuestros niveles de cortisol, hormona del estrés, y liberan endorfinas que producen una sensación de felicidad y tranquilidad.
En mindfulness, la capacidad de sonreír es una de las formas que más ayuda a encontrarse con uno mismo. Así como la mejor técnica para reencontrar la alegría.
Prueba este sencillo, pero escandaloso ejercicio y reconectarte con la tuya.
Comienza a reír. Si necesitas algo para prender la mecha del humor, piensa en lo más divertido que te haya pasado, alguna anécdota o incidente que nunca deja de hacerte sonreír.
Actuar ahora riendo a carcajadas como si estuvieras en una obra de teatro. No se contenga, probablemente sea mejor no hacerlo en transporte público, por eso de las miradas raras. Enfócate solamente en reír mientras recuerdas ese disparate o recuerdo más divertido.
Notarás que tu risa falsa comienza a convertirse en real y una vez que suceda, sigue así. Déjate llevar por la risa. Ríe hasta llorar. Te sentirás mucho mejor después.
Este ejercicio de mindfulness lo puedes realizar todas las mañanas mientras te miras en el espejo. La risa es contagiosa, así que intenta hacerlo con alguien con quien vives.
Coméntanos tu experiencia al realizarlo y si te ha funcionado compártelo con tus amigos.
Hemos creado este espacio para encontrar paz y tranquilidad en nuestras aceleradas vidas, aquí encontraras: ejercicios, artículos y retos que te ayudaran a desestresarte y disfrutar tu presencia. Enfócate en lo importante y no te vuelvas loco en este mundo tan fugaz.
“Atención consciente de nuestro interior para nuestra salud y bienestar”