En el año en que quedó huérfano de madre, 1958, le ocurrieron dos cosas: su padre le compró su primera guitarra eléctrica y su única calificación baja en la escuela fue en música.
Dos años después, tendría problemas con la ley. Le dieron a elegir entre la prisión o el servicio militar. Jimi optó por lo segundo, pero hizo lo posible para que lo dieran de baja. Visitó entonces al psicólogo del ejército y se dice que declaró ser homosexual. En entrevistas posteriores, Hendrix lo desmiente alegando que para obtener la baja adujo problemas en la espalda por un salto en paracaídas.
En el momento de despedirse del cuartel, el informe militar decía que Hendrix era incapaz de mantener una conversación inteligente.
La muerte de Hendrix a los 27 años sigue siendo un episodio polémico. Su deceso se produjo como consecuencia de la mezcla de somníferos y alcohol. El hecho de que su representante fuera el beneficiario de su seguro de vida ocasionó múltiples teorías, ya que a muchos les pareció extraño que Jimi se hubiera excedido casi de manera suicida.
En 2003, la revista Rolling Stone lo eligió el mejor guitarrista de todos los tiempos.